El poder te lo da el conocimiento, lee, aprende, escucha, comparte y entonces comienza a hablar de lo que sabes.
Las palabras correctas construyen relaciones, mejoran la comunicación, abren puertas pero una sola palabra fuera de contexto arruina el momento.
Cuando trabajamos en comunicaciones es importante tener claro quién será tu receptor y que efecto quieres causar en el cuando lees o escuche tus palabras.
Existe también la comunicación del cuerpo, algunos somos fáciles de leer y leemos fácil a quienes están a nuestro alrededor pero que podría garantizar que tu cuerpo no transmitió el mensaje equivocado a esa persona que esta frente a ti ansiosa de saber que piensas.
Todos manejamos un tema en concreto o tenemos una historia que disfrutamos compartiendo, si todo tenemos eso por que aún vemos aquellos que siguen hablando de lo que no saben?
Focalizate en tus conocimientos, esto hará que tu comunicación tenga mucho poder para quien te escucha.
No pierdas tu tiempo, llego la hora de aprender y especializarte en lo que te gusta. El momento es ahora, comienza ya.